La Guerra del Pacífico ; Los Héroes Olvidados             www.laguerradelpacifico.cl                                                                                                                   Por Mauricio Pelayo González
 







 

 

La Pintura en la Guerra del Pacífico

Fernando Lavoz Bustamante

 

 

 

 

 

EL ESTANDARTE ( Bitácora de una Imagen)

 

 

 

Lo que une un país, es ciertamente su historia, que sobrepasa las diferencias circunstanciales de cada hombre en particular. Los hechos históricos penetran el alma de cada habitante de una nación, como algo esencial que lo hace crecer asimilando como propio la memoria que gesta la Identidad Nacional. Basta con mencionar algún episodio histórico, para que se gatille en la mente del chileno la evocación profunda de ser parte de un lugar común a otros.

Sin duda que en la memoria se da el nexo entre el episodio y el testimonio gráfico que ya forma parte del ideario nacional. La relación del Combate Naval de Iquique y la pintura de Somerscales, o la del Desastre de Rancagua con el óleo de Subercaseaux son casi reflejas. La Historia de Chile y su iconografía son inseparables.

La pintura de historia, siempre ha ilustrado los grandes hechos de los grandes hombres, ¿ dónde queda el hombre común que participó de forma anónima en los grandes conflictos nacionales?

Las batallas, más que simples actos militares, adquieren una trascendencia moral para un pueblo ya que le dan una " irrefrenable reacción de confianza en su destino".

De manera imprevista aparece en mi imaginario, " El Estandarte " como un ícono venido de lejanos recuerdos infantiles sobre la Guerra del Pacífico. El héroe y su gesta.

Desde ese instante, y de manera urgente, surge la necesidad de certificar esta memoria.

 

ANALISIS

 

Una pintura histórica, necesariamente debe pasar por un estudio de los hechos, circunstancias y protagonistas, que lejos de limitar la capacidad creativa, son elementos que enriquecen y potencian la imagen. Teniendo en cuenta esto, me centré, para el análisis de este hecho histórico ( Combate de Tarapacá) en tres esferas de análisis:

 

1.               Histórico

   2.     Testimonial

3.         Periodístico

 Histórico

 

El punto de vista del historiador, nos presenta el episodio dentro de un contexto conocido. Con una distancia histórica que permite observar el hecho, como un producto de una contingencia ya sabida y como un paso más hacia el fin que ya es conocido. Contiene el análisis historiográfico completo. Los hechos y procesos estudiados. Los tipos de información y los canales de transmisión definidos. La lectura del historiador proviene básicamente de las consecuencias del acto anterior dentro de un contexto donde actúan todas las partes: personajes, movimientos diversos, enclaves internacionales, circunstancias imprevistas.

 

Se presupone una determinada manera de analizar los hechos y métodos que van acorde a los objetivos planteados por el autor. Se conjugan elementos ideológicos, literarios y  filosóficos.

 

Testimonial

 

Aunque es otra su lectura, la fuente testimonial nos ofrece la misma garantía que la periodística. Análisis subjetivo. Es el testimonio de los hombres que gestan el hecho. Es decir, los que participan de manera activa en el desarrollo del episodio. Los testigos. Los sobrevivientes. Es la versión personal del hombre que no tuvo la distancia para comprender la trascendencia del acto ya que sólo vivió el momento crucial, valor inconmensurable.

 

Periodístico

 

La información que proviene de los periódicos de la época, aparece como una fuente secundaria. Destaca el primer enfrentamiento entre la noticia y los contemporáneos de la misma. Es la notificación del acto. La civilidad llena de incertidumbre y ansiosa de noticia, recibe cada día informaciones acerca de lo que ocurre en el norte. Vibra con los triunfos, sufre con las derrotas. Es el nexo único que liga el escenario de la guerra y sus protagonistas con el resto del país que por su geografía parece distante

 

Descripción Histórica - Técnica

 

Hecho histórico           Batalla de Tarapacá. Acción del 2º de Línea

 

Ubicación temporal     27 de noviembre de 1879

 

Ubicación cronológica          10:00 A.M. - 16:00 P.M. hrs.

 

Ubicación geográfica  Quebrada de Tarapacá ( desierto)

 

Topografía                            Quebradas y cerros

 

Características            Guerra de desierto, llamada " guerra del agua"

Obliga al combatiente a llevar toda clase de impedimenta para sobrevivir.

 

Mando      Teniente Coronel Eleuterio Ramírez

Formación        7 compañías del 2º de Línea

                   1 Escuadroón de cazadores a caballo

                    2 cañones de bronce de la artillería de 

                    marina

Total                    950 hombres

 

                     Descender hasta el fondo de la    quebrada para llegar hasta la aldea de Huaraciña y presionar al ejército enemigo en dirección al poblado de San Lorenzo y luego hacia la aldea de Tarapacá, para finalmente obligarlo a estrellarse contra la columna Sta. Cruz, en Quillagusa.

 

 El mando chileno cometió un grave error estratégico, al enviar una división reducida de efectivos a Tarapacá; la falta de tranquilidad para dirigir la acción, produjo que la tropa chilena se dirigiera a la zona, sin el debido equipamiento, con falta considerable de víveres y agua. El 27 de noviembre, se produjo el enfrentamiento, que finalizó con la pérdida considerable de miembros de las tropas chilenas, " el combate fue un desastre para  la armada chilena, cuyos efectivos quedaron reducidos en un 32% "[1]

 

Testigo

 

 

" El abanderado, subteniente Telésforo Barahona, que con su pabellón en el alto avanzaba en medio de las balas enemigas, recibía también una herida en el hombro al dar el primer asalto. Debilitado por la pérdida de sangre, se negó sin embargo a entregar a uno de los sargentos de la escolta aquel glorioso peso y continuó trepando la escabrosa pendiente en medio de una lluvia de proyectiles que iban matando uno a uno a los que le rodeaban."

 

 

Los periódicos

 

 

Diario de la Guerra

Jueves 4 de diciembre 1879 ( n 806)

Boletín de la Guerra

 

" La División chilena salió del campamento de Dolores el día 26 a las 3 hrs. P.M. i llegó al pueblo de Tarapacá el 27 como a las 10 A.M. después de haber caminado toda la noche.

Aunque supo que el pueblo de Tarapacá estaba ocupado por muchos más enemigos de los que había creido, atacó la población sin fijarse en la desigualdad del número, ni en otras condiciones desfavorables.

Se siguió entonces un combate sumamente reñido y mortífero. Este combate duró siete horas consecutivas. Las tropas chilenas hicieron verdaderos prodigios de valor.

 

 

 

 

Viernes 5 de diciembre 1879

Boletín de la Guerra

 

" El Comandante Ramírez fue herido en un brazo i depositado en un rancho. Esto fue al principio del combate. Como después los chilenos tuvieran por algunas horas que retirarse de Tarapacá, se ignora su paradero, pues cuando recuperaron el pueblo ya no hallaron al comandante del 2º de línea .

 

El abanderado Barahona, en alto la bandera, animado con su palabra i la presencia del amado pendón a los soldados de regimiento. Una y otra vez herido, rodó envuelto en su querido estandarte hasta el fondo de una quebrada adonde el enemigo, asombrado ante ese heroismo sin igual, bajó a arrancarle esa preciosa enseña i le fue preciso para conseguirlo abrir su mano crispada que aferraba el asta, con las bayonetas de sus fusiles."

 

HISTORIA DE LA IMAGEN

 

Elementos extraídos de relatos de los soldados en campaña que van construyendo las imágenes.

 

 

 

 

 

Descripción de la escena

 

". Llegado a la segunda trinchera, recibió en medio del pecho una segunda bala, mientras otras le tronchaba el asta del pabellón."[2]

 

 

 

Descripción del paisaje

 

" El brillo del reflejo de la luz sobre la arena se atenuó de pronto, pero esa arena y el ambiente adquirieron juntos una tonalidad más subida, más profunda, algo de amarillo anaranjado, con tintes de oro, aquí y allá, en el cielo y en el suelo.El horizonte hacia el lado del mar se divisaba envuelto en una especie de nimbo de color de lila y color de malva ¡ cuán hermoso! "[3]

 

 

Clima psicológico antes del combate

 

" Se ordenó seguir a marcha forzada y se tocó diana, empezando por el himno de Yungay. La tropa prorrumpió en estrepitosos vivas a Chile, a los que se unían los gritos de júbilo de los navales " [4]

 

 

Equipamiento del soldado en combate

 

 

".empezamos a subir al trote, después de arrojar nuestros atados de ropa. El suelo, en una gran extensión quedó lleno de rollos de todos tamaños y clases. Yo boté la manta o frazada, el capote, el levita, camisa y calzoncillo. Quedamos con lo encapillado "[5]

 

 

 

Durante el combate

 

" En los momentos de lucha nada se piensa; el hombre desnudo de sus sentimientos, es una fiera rabiosa, que tiene sólo el instinto de matar antes que la muerte lo saque del combate."[6]

 

" Envuelto en un círculo de fuego, en medio de nubes de humo, sólo sé que oí gritos y gemidos,choques y silbidos de balas. Encuanto a lo que sucedió. no lo sé: una confusión horrible de hombres que saltaban y se agazapaban, unos corriendo hacia delante, otros retrocediendo medio despavoridos "[7]

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Después del combate

 

". después, el más agudo dolor, la más honda pena hiere i destroza nuestro pecho. Ahí cuan horrible es el día que sigue a una batalla. El campo sembrado de cadáveres i heridos cuyos clamores conmoverían al corazón más duro, es el triste espectáculo que sigue a la batalla i luego nuestro pensamiento vuela a Chile i un nuevo pesar nos abruma y desconsuela " [8]

 

". por todos lados sables, fusiles intactos o desmontados, cañones, cartucheras, kepis y, en medio de todo, cadáveres de hombres y animales, mutilados atrozmente; la guerra con todos sus horrores ¡ por donde quiera, la desolación y la muerte.! "[9]